Finiquito y baja voluntaria
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¿Cuál es la cantidad que recibiré si decido dejar la empresa? Es una de las preguntas más frecuentes que se hacen cuando alguien considera renunciar a su puesto de trabajo. El pago de la finalización de contrato en caso de renuncia voluntaria es un tema importante y está relacionado con el finiquito. Sin embargo, es importante destacar que no se trata de una compensación o algo similar.
Otra duda común se refiere a la relación entre finiquito, renuncia voluntaria y preaviso. ¿Perderé mi derecho al finiquito si no aviso con 15 días de anticipación? Es importante recordar que el finiquito es un derecho de todo trabajador, por lo que en caso de renuncia no se puede ignorar su importancia.
Derecho a finiquito
Es importante destacar que el finiquito es un derecho que todo trabajador posee al finalizar una relación laboral, ya sea que el contrato haya terminado o que el propio trabajador haya tomado la decisión de renunciar. Cuando un trabajador deja una empresa, es posible recibir un pago por finiquito.
Al finalizar la relación laboral, se entrega al trabajador un documento de saldo y finiquito que detalla las diferentes cantidades adeudadas en una fecha determinada. Es irrelevante la causa del fin de la relación laboral o la naturaleza de las deudas.
Hay que tener en cuenta que el finiquito es una remuneración que el trabajador ha conseguido a través de su trabajo, pero aún no ha recibido. Es por esto que se tiene derecho a recibir un pago por finiquito en caso de baja voluntaria. En el finiquito se incluyen 5 conceptos que en conjunto determinan el total a recibir:
- El salario correspondiente a los días trabajados desde la última nómina.
- La parte proporcional de las pagas extra no prorrateadas, que se han generado pero no se han recibido.
- Los días de vacaciones no disfrutados, por los cuales la empresa debe cotizar y aparecerán en el historial laboral.
- En el caso de existir, las horas extras pendientes de pago.
- Otras cantidades que hayan sido acordadas previamente o especificadas en el convenio laboral. Esto podría incluir bonificaciones, metas alcanzadas, recompensas extraordinarias y otros tipos de pagos similares.
¿Cómo calcular el finiquito?
Conocemos que al renunciar a nuestro empleo, tenemos el derecho de recibir un finiquito, pero la gran incertidumbre es la cantidad a percibir. Para obtener el cálculo del finiquito, podemos seguir los procedimientos habituales, considerando los mismos 5 puntos que se contemplan al calcular el finiquito por finalización de contrato.
En primer lugar, debemos calcular el salario correspondiente a los últimos días trabajados. Para esto, es necesario determinar el salario diario. Si el sueldo mensual es consistente, simplemente se divide el importe de la nómina entre 30. Finalmente, se multiplica este resultado por el número total de días laborados hasta el momento de la renuncia.
Al calcular los días de vacaciones no disfrutados, podemos utilizar la fórmula que establece que corresponden 30 días por cada 360 días trabajados (no 365). A través de una regla de tres sencilla, podemos determinar la cantidad de días de vacaciones a los que tenemos derecho según los días laborales acumulados. Por último, multiplicamos esta cifra por el salario diario.
Después de haber calculado el sueldo correspondiente a los días trabajados y las vacaciones no disfrutadas, debemos prestar atención a las pagas extra no prorrateadas. Si el trabajador tiene 14 pagas en lugar de 12, debemos comprobar cuándo cobró la última paga extra. De esta manera, podremos determinar cuánto se puede cobrar de la siguiente paga extra. Para hacerlo, se divide el total de la paga extra entre 182,5 días y se multiplica por el número de días trabajados desde el 1 de enero o el 1 de julio hasta el momento de la renuncia.
Una vez calculados el salario pendiente, las vacaciones y las pagas extra, se suman los tres conceptos para obtener el total a cobrar en el finiquito. Es posible que surjan preguntas sobre las horas extras y otras cantidades adeudadas. Si la empresa debe pagarlas, se deben agregar a la cantidad total del finiquito. De esta manera, se puede calcular el finiquito final.
Consecuencias del finiquito de baja voluntaria
Existe una remota posibilidad de que el finiquito resulte en un pago adicional. Esto puede ocurrir en situaciones excepcionales, como cuando se han disfrutado más días de vacaciones de los que corresponden o si se ha recibido un anticipo de pago. Aunque estos casos son poco comunes, es importante considerarlos antes de tomar la decisión de renunciar.
¿Qué ocurre con los 15 días de preaviso?
Aunque no es un requisito necesario, es altamente aconsejable notificar con 15 días de antelación antes de renunciar. Si no se hace, es posible que te descuenten esos días del finiquito. Por lo tanto, si proporcionas ese margen de preaviso de 15 días, el finiquito será mayor que si no hay notificación previa. Simplemente es suficiente con enviar una comunicación escrita.
Finiquito no conforme
Al recibir el finiquito, es posible que surjan problemas que debemos afrontar. Por ejemplo, puede darse el caso de no estar de acuerdo con el importe ofrecido. Tal vez hayas realizado tus propios cálculos y la suma que te han propuesto es menor de lo esperado. Si esto sucede, puedes firmar el documento como «no conforme» y presentar una reclamación posteriormente.
Asimismo, en el caso de baja voluntaria o de finalización del contrato sin renovación, se tiene derecho tanto al finiquito como a la indemnización. Estos conceptos pueden estar reflejados en un mismo documento o en hojas separadas. Si falta alguno de ellos, deberás firmar el documento como «no conforme».
¿Y si la empresa no quiere pagarme el finiquito?
Se puede exigir el pago del finiquito por baja voluntaria si la empresa no lo entrega o no lo paga correctamente. Es recomendable realizar la reclamación por escrito y, si la empresa sigue sin cumplir con su obligación, se tiene un plazo de un año para reclamar por vía judicial. Para ello, se presenta una papeleta de conciliación y, en caso de que no surta efecto, se inicia una demanda.
Es importante tener en cuenta que el finiquito no es una indemnización, sino el sueldo pendiente de cobrar, y que la empresa está obligada a pagarlo. Si no lo hace, el trabajador puede exigir su pago.