RRHH

Todo sobre la reducción de jornada

La reducción de la jornada es un derecho de los trabajadores, al que pueden recurrir una vez que se reúnan una secuencia de condiciones

La reducción de jornada laboral es una medida a la que el trabajador puede recurrir una vez que se ve obligado a aceptar determinadas responsabilidades a lo largo de su horario de trabajo común.

Se trata de supuestos regulados en el Estatuto de los Trabajadores.

Tipos de reducción de jornada: supuestos

La reducción de la jornada de trabajo es una medida conciliadora entre el empleado y la organización cuyo objetivo es reducir la carga horaria.

Esta solo puede solicitarse si el individuo está al mando de hijos o de cualquier familiar que haya sufrido alguna patología grave.

Entre los supuestos que se reconocen legalmente en el artículo 37 del Estatuto de Los Trabajadores se hallan esos referidos al cuidado de hijos en los próximos escenarios:

Reducción de jornada por cuidado de hijos

Este está formado de 2 casos:

  • Cuando el hijo o hija sea menor de doce años
  • Si el hijo o la hija tiene alguna clase de discapacidad que le impide desenvolverse comúnmente.

Otros supuestos

Además de dichos puntos, si el empleado tiene un familiar de edad avanzada u otro que haya sufrido un percance grave y que necesite cuidado o padezca de alguna patología grave, además puede pedir la reducción de jornada gremial. para contribuir a la conciliación familiar.

En cada caso se necesita dar la documentación que acredite tal condición. El punto clave es que el individuo no puede valerse por sí misma.

Cómo pedir la reducción de jornada

Para hacer positiva la reducción de la jornada se necesita continuar diversos pasos.

  • Plazos de la reducción de la jornada laboral

El primer paso que tiene que realizar el trabajador es el anterior aviso de en qué momento iniciaría la reducción y una vez que finalizaría. La solicitud debería desarrollarse con un mínimo de 15 días de anticipación.

  • El horario de la reducción de jornada

Legalmente, está establecido que el empleado:

“tendrá derecho a una reducción de la jornada laboral diaria, con el decrecimiento proporcional del sueldo entre, por lo menos, un octavo y un más alto de la mitad de la duración de aquella”

Esto queda predeterminado en el artículo 37.6 del Estatuto de los Trabajadores y desea mencionar que la reducción de la jornada debería aplicarse dentro del horario que ejecuta el trabajador todos los días.

Para eludir que esta alteración perjudique la dinámica provechosa de la organización, es aconsejable disponer de un programa de control horario como el que dispone Nivimu. Esta herramienta da la posibilidad de tener un control de vacaciones, de horas trabajadas, y las bajas de la plantilla.

El sistema posibilita comprender estas labores fácilmente y automatizada, sin solicitar hojas de cálculo ni papel, haciendo más fácil la administración documental, sin necesidad de emplear espacio físico, todo queda en la nube. Se beneficia el seguimiento del horario laboral de cada trabajador.

Toda esta información queda respaldada por medio de informes con validez jurídica en caso de ser primordial, entre otras ventajas.

  • Duración de la reducción de jornada

Si el empleado acredita que requiere la reducción de la jornada gremial para proteger de un menor de doce años o de un familiar que no logre valerse por sus propios medios, esta reducción debería ser de entre un octavo de la jornada gremial y tener –como máximo– la mitad de la duración de la jornada.

Si hablamos de proteger a un menor perjudicado por patología grave, el empleado va a poder pedir que la reducción de la jornada gremial sea de por lo menos la mitad de la jornada. Es viable que esta reducción llegue a ser completa.

En dichos casos es viable que haya acuerdos que establezcan otro tipo de convenios y condiciones que influyan en la elección relacionadas con la jornada laboral.

  • ¿Cuánto se cobra a lo largo de la reducción de jornada?

No es viable entablar un importe específico relacionadas con cuánto se cobra a lo largo de la reducción de la jornada ya que este es dependiente de la proporción de horas.

El sueldo se disminuye en la misma proporción que la reducción de la jornada, influyendo tanto en el sueldo base como en los accesorios salariales establecidos en la nómina y por los que se cotiza a la Estabilidad Social.

  • La compañía no puede negar la reducción de jornada

Legalmente, la organización no puede negarse a la demanda de reducción de la jornada. Si lo hace, alegando necesidades productivas y organizativas, o en caso de abuso de derecho o inexistencia de buena fe, la compañía podría verse expuesta a una impugnación en tribunales.

En caso de impugnación, el empleado además va a poder alegar perjuicios y males, que tienen la posibilidad de ser evitados por la organización si a lo largo de el litigio posibilita al empleado contar con del horario requerido. Tanto la organización como el empleado deberá justificar, por medio de documentos y otros requisitos, sus posturas relacionadas con la situación.

El trabajador va a tener un tiempo de 20 días hábiles, que inician desde la negación de la súplica, para obligar la demanda. En este periodo no se necesita proponer conciliación gremial. En caso de que sea planteada, va a ser previa al juicio y el empleado tendrá que exponer sus respectivas propuestas.

La sentencia va a ser dictada en un plazo de 3 días y no podría ser recurrible por ni una de las piezas.

Consecuencias de la reducción de jornada gremial para la compañía

La reducción de jornada gremial podría dañar a la productividad en el trabajo. En aquel caso, la organización podría apoyarse en un programa de administración de tiempo para entablar un plan que posibilite abordar la situación.

Esto, paralelamente, quizá haga problemas organizativos. Dichos escenarios además son una posibilidad para promover nuevos desafíos laborales en la organización.

Para fomentarlos, se sugiere disponer de un programa de encuestas y otro de formación para conocer las habilidades del empleado y desarrollarlas, pensando tanto en su aumento como en aumentar su responsabilidad dentro del propio organigrama de una organización.

Con ambas herramientas tienen la posibilidad de producir resultados satisfactorios como para el empleado como la organización, por medio de evaluaciones y estudio particulares y grupales.

Por medio de las encuestas es viable conocer cuáles son las opiniones e intereses del empleado relacionadas con sus labores. Y las necesidades y dudas que logre llegar a tener respecto a su puesto.

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