Proceso de selección de personal

El proceso de selección de personal consta de varias etapas y puede ser un recorrido largo, desde la identificación de una vacante hasta la incorporación del nuevo empleado. Es crucial comprender cada etapa y actuar de manera apropiada para lograr un proceso exitoso. De esta manera, el nuevo trabajador podrá cumplir con las expectativas generadas durante el proceso de contratación.

Detección de las necesidades en los procesos de selección de personal

La detección de las necesidades de personal de la empresa es la primera etapa en cualquier proceso de selección. Esta etapa ayuda a identificar qué puestos necesitan ser reforzados y qué tipo de perfil es adecuado para abordar las deficiencias de la compañía.

También es importante explorar la posibilidad de cubrir las necesidades a través de la promoción interna. La necesidad de nuevos trabajadores puede ser permanente, puntual, temporal o para prepararse para el futuro. Durante esta etapa, es crucial determinar la duración del plazo para recibir currículums.

Descripción del puesto de trabajo

Una vez se han identificado las necesidades de la empresa, el siguiente paso es elaborar una descripción del empleo que se está ofertando. Esta descripción es la base de la oferta de empleo y es esencial para la selección de currículums.

Por tanto, es fundamental ser lo más preciso posible en la descripción de las tareas y habilidades necesarias, así como la formación y experiencia requerida, tanto mínima como deseada. También se deben incluir detalles importantes como si el trabajo implica trabajar bajo presión y las condiciones salariales ofrecidas.

Publicar la oferta de empleo

Una vez que se ha definido el perfil del candidato ideal, es momento de publicar las vacantes. Es importante hacerlo en el lugar adecuado para llegar a los candidatos que cumplen con el perfil buscado. Publicar las vacantes en portales de empleo especializados, medios del sector o incluso en agencias de empleo, aumenta la visibilidad de la oferta.

También es importante publicar las vacantes en la página web y redes sociales corporativas. Otra estrategia interesante para llegar al nicho de candidatos adecuado es a través del boca a boca de los empleados de la empresa.

Recepción y cribado de candidaturas: herramientas de selección de personal

Una vez que los currículums comienzan a llegar, se puede llevar a cabo una primera selección entre aquellos que cumplen con los requisitos especificados en la oferta y aquellos que no los cumplen.

Es recomendable contar con un software ATS para gestionar eficientemente los procesos de selección, evitando que los currículums se pierdan y asegurando una coordinación efectiva con el equipo de Recursos Humanos.

La preselección tiene como objetivo reducir el número de candidatos a un número manejable. En esta etapa del proceso de selección, el equipo de Recursos Humanos desempeña un papel crucial al determinar si el candidato cumple o no con los requisitos especificados en la oferta a partir de un simple currículum.

Pruebas y entrevistas

La evaluación del candidato durante la entrevista es crucial en el proceso de selección de personal. El entrevistador debe prestar atención tanto a las respuestas verbales como al lenguaje corporal del candidato.

Durante la entrevista, se debe indagar sobre la trayectoria académica y profesional del candidato, las situaciones laborales a las que se ha enfrentado y sus expectativas laborales para determinar si se ajustan a lo que ofrece la empresa. Además, se pueden utilizar preguntas de tensión o inesperadas para evaluar su comportamiento ante situaciones específicas.

Las pruebas técnicas o prácticas también pueden ser útiles para comprobar las habilidades y competencias del candidato. Al final de esta fase, se debe tener una lista corta de candidatos con los que se realizarán entrevistas finales.

Valoración de los candidatos

Después de completar la ronda de entrevistas, llega el momento de analizar la evaluación de cada candidato. El equipo de Recursos Humanos pondrá en común las conclusiones a las que ha llegado. A partir de su experiencia, habilidades y actitud, se selecciona al candidato que mejor se adapta a las necesidades de la empresa.

Una vez seleccionado al candidato perfecto, se da paso a la contratación del trabajador elegido, lo que pone fin al proceso de selección de personal. Sin embargo, conviene tener presente que, entre las candidaturas descartadas, podrían encontrarse aspirantes que en el futuro podrían ser de gran interés para la empresa.

Por ello, para no perder el contacto con ellos, se puede crear una base de datos con el registro histórico de candidatos, de manera que se pueda acceder a este banco de talento en caso de que surjan nuevas necesidades en el futuro.