Jornada irregular, ¿eso qué es lo que es?
Si le preguntas a cualquier persona qué entiende por jornada laboral, seguramente muchos indicarán que se trata de aquella que tiene 8 horas y que se desarrolla de manera seguida o que, por el contrario, es partida, esto es, con un descanso para comer. No obstante, no es el único tipo de jornada laboral que existe, la jornada irregular es una práctica cada vez más extendida en las industrias y en sectores muy diversos como el sector retail, la hostelería, fabricación o incluso funcionarios. ¿Hay alguna manera de gestionarla mejor? Por supuesto.
Así puedes gestionar mejor la jornada irregular en tu empresa
La jornada irregular es aquella medida que facilita a la empresa el tener cierta flexibilidad a la hora de organizar el trabajo de sus empleados.
El Estatuto de los Trabajadores permite a las empresas establecer jornadas de trabajo que superen las 40 horas semanales siempre y cuando haya acuerdo con los representantes de los trabajadores. De no haberlo, la jornada solo se podrá distribuir de manera irregular a lo largo del año un 10% de lo que supone la jornada de trabajo.
En el supuesto de que la jornada completa anual se compute en 1800 horas, la jornada se podría distribuir de manera irregular en 180 horas cuando no se haya alcanzado un acuerdo con los representantes de los trabajadores y en el cómputo anual no se podrían superar las 1800 horas de trabajo efectivo.
Las claves de la jornada irregular
¿Qué hay que tener en cuenta a la hora de establecer la jornada irregular en la empresa? Pues bien, es importante que la empresa avise previamente al empleado de este tipo de jornada. Lo normal es que el trabajador pueda conocer con un mínimo de cinco días las horas deberá hacer en la empresa y cómo será esa distribución laboral.
A su vez, habrá que tener en cuenta el número de horas diarias que puede hacer el trabajador no supere a nueve, excepto que en el convenio colectivo figure otra cantidad. Aunque se establezca otra distribución del tiempo del trabajo diario, se deberá respetar el descanso entre jornadas, por lo que debe haber un mínimo de doce horas entre una y otra.
También podrán disfrutar los trabajadores de un descanso mínimo semanal, acumulable por períodos de hasta catorce días que, como regla general, comprenderá la tarde del sábado o, en su caso, la mañana del lunes y el día completo del domingo.
¿Y qué hay de la ‘bolsa de horas’?
Las empresas con demandas estacionales, picos de carga de trabajo, épocas con menores volúmenes de venta o gran fluctuación de la actividad suelen recurrir a la también llamada ‘bolsa de horas’, que alude a la gestión de la jornada irregular. ¿Tú cómo lo haces en tu empresa?
Muchos responsables de Recursos Humanos consideran que puede llegar a ser frustrante la gestión de las bolsas de horas, ya que les hace perder tiempo que quizá podrían dedicar a otras tareas por el simple hecho de tener que hacer planificaciones variables del horario de trabajo del personal.
Ayudarse de un software de gestión que integre todo tipo de funcionalidades para mejorar en eficiencia a la hora de dirigir todo lo referente al personal de la empresa es una apuesta segura para ahorrar tiempo y ser más efectivos.
En este sentido, nosotros te recomendamos que pruebes el módulo de gestión de la jornada irregular de Nivimu. Con él podrás hacer un reparto más equitativo de los turnos de trabajo, conociendo al detalle las horas que hizo en el turno anterior cada trabajador, generarás automáticamente los turnos, dispondrás de comparativas de las horas trabajadas y las previstas y ganarás en fluidez a la hora de organizar los turnos. ¿Qué nos dices? ¿Te animas a probarlo? Saldrás ganando.