Reclutamiento mixto

En la empresa se presenta una oportunidad de trabajo disponible y surge la típica pregunta: ¿Deberíamos buscar externamente o aprovechar el talento interno? Afortunadamente, no estamos limitados a elegir una única opción. El reclutamiento mixto nos permite aprovechar lo mejor de ambos enfoques.

Aunque el objetivo principal siempre es encontrar al candidato adecuado para ocupar la vacante, no siempre se implementa correctamente el proceso de selección de personal. Es importante conocer las características, ventajas y desventajas del reclutamiento mixto, así como algunos ejemplos ilustrativos.

¿Qué es el reclutamiento mixto?

El reclutamiento mixto es una combinación de reclutamiento externo y reclutamiento interno en el proceso de adquisición de talento.

Cuando pensamos en reclutar personal, generalmente nos viene a la mente la búsqueda externa. Sin embargo, en muchas ocasiones, contamos con talento interno en la organización que solo requiere una oportunidad.

El reclutamiento mixto busca integrar ambas modalidades, lo que resulta en procesos de selección más completos, lo que a su vez facilita la elección del candidato adecuado.

No obstante, este tipo de reclutamiento puede variar según la estrategia adoptada. Identificamos hasta tres tipos de reclutamiento mixto:

• Reclutamiento externo y luego interno: se prioriza la búsqueda externa, y si esta no tiene éxito, se busca dentro de la empresa. Uno de los casos más comunes es cuando se busca personal cualificado. La organización lo busca externamente y, si no lo encuentra, promociona a sus propios empleados, ampliando así el grupo de candidatos.
• Reclutamiento interno y luego externo: en este caso, la empresa otorga prioridad a sus empleados para ocupar las vacantes. Solo cuando estas quedan sin cubrir o si no hay personal adecuado disponible, se busca fuera de la organización. Esto también se aplica si los candidatos internos no se ajustan completamente a la posición ofertada.
• Reclutamiento simultáneo: podríamos decir que esta es la forma más tradicional de reclutamiento mixto. Ambas modalidades se utilizan simultáneamente, ofreciendo igualdad de oportunidades para ambas. De esta manera, un candidato que actualmente trabaje en la empresa compite en igualdad de condiciones con un candidato externo.

Según la modalidad adoptada, se emplearán diferentes métodos de reclutamiento interno y externo. Entre los métodos internos se incluyen planes de carrera, publicación de vacantes a través de sistemas de comunicación interna, entre otros. Entre los métodos externos se encuentran la página web de empleo de la empresa, portales de empleo, programas de referidos, o incluso contactar directamente al candidato.

Ventajas

El reclutamiento mixto ofrece la gran ventaja de aprovechar lo mejor tanto del reclutamiento externo como del interno.

Por un lado, los empleados provenientes de fuera aportan un soplo de aire fresco. Traen consigo nuevas ideas y una perspectiva diferente e innovadora que nos ayuda a crecer, especialmente cuando buscamos un cambio.

Por otro lado, entre las ventajas del reclutamiento interno que también se aplican al mixto, destaca la motivación de los empleados. El hecho de contar con planes de carrera, oportunidades de promoción interna y el reconocimiento de su trabajo resulta muy motivador. Esto refuerza su compromiso y dedicación hacia la empresa.

Además, el reclutamiento mixto evita el conformismo en el equipo. Estimula a los empleados a abandonar su zona de confort y buscar una constante capacitación. La empresa puede contribuir facilitando la formación y el desarrollo del talento que ya tiene en sus filas.

Otra ventaja importante es que la organización conoce al empleado seleccionado para ocupar un puesto. Está familiarizada con sus fortalezas, áreas de mejora, habilidades y estilo de trabajo, al igual que el empleado conoce la empresa y a sus profesionales. Esto facilita su adaptación al nuevo puesto.

Cuando se aplica correctamente, esta estrategia nos brinda un reclutamiento más eficiente y económico. Una de las ventajas del reclutamiento externo es tener acceso al talento que no tenemos internamente. De esta manera, podemos cubrir las vacantes más rápidamente, evitando las pérdidas económicas asociadas con dejarlas sin cubrir.

Desventajas

Antes de implementar el reclutamiento mixto, es importante comprender sus limitaciones. Por ejemplo, al priorizar el reclutamiento interno sobre el externo, existe el riesgo de encontrarnos con un talento limitado. Por lo tanto, es aconsejable buscar alternativas más allá de la organización.

Otra desventaja del reclutamiento interno es la tendencia hacia la endogamia del talento. Lo que debería ser una forma de retener el talento puede convertirse en un gran obstáculo si la organización descarta por completo el talento externo. Por esta razón, es importante combinar ambas modalidades.

No podemos pasar por alto el peligro de la desmotivación en el equipo. Además, este riesgo es doble. Por un lado, la contratación de empleados externos puede generar frustración o desconfianza dentro del equipo existente. Por otro lado, los empleados que no sean promovidos pueden estancarse y eventualmente decidir abandonar la organización.

Es importante tener en cuenta que dos más dos no siempre suma cuatro. Un empleado que rinde bien en un puesto no necesariamente rendirá igual en otro, incluso si está preparado para ello.

Además, al promocionar a un empleado interno, se crea una nueva vacante que debe ser cubierta. En caso de que algo salga mal, no siempre es posible reubicar al empleado en su posición anterior.

Es esencial tener en cuenta estas consideraciones al aplicar el reclutamiento mixto y adoptar medidas para mitigar sus posibles limitaciones y riesgos.